Sánchez ignora las críticas de sus socios por el gasto militar: lo subirá hasta el 2% del PIB «sí o sí»
Pedro Sánchez ha respondido a las peticiones internacionales de más apoyo a Ucrania con un anuncio que se extiende ya ente todos los miembros de la OTAN: con un aumento del gasto en Defensa. Y los socios del PSOE han contestado a su vez con un grito airado por lo que consideran que es contrario a su “pacifismo” y a los compromisos de Gobierno adquiridos al inicio de la legislatura. Lo cierto es que la decisión está tomada: se trata de un compromiso internacional y los próximos Presupuestos incorporarán un aumento del gasto militar hasta llegar al 2% del PIB “sí o sí”, como señala una fuente del PSOE. Traducido: se quejen lo que se quejen los socios de Sánchez, se elevará el gasto militar.
ERC, Podemos y Bildu no han tardado en mostrar su rechazo absoluto al compromiso de elevación del presupuesto militar. Pero “no se trata de una decisión negociable. Habrá esa subida porque es clave para el papel de España en el contexto internacional”, señala una fuente del PSOE a OKDIARIO.
“Se pueden quejar lo que quieras, no forma parte de las cuestiones negociables”, añade la misma fuente. Lo cierto es que España es uno de los países que más asistencia recibe del BCE y del conjunto de la UE. Y el compromiso comunitario con Ucrania, frente a Rusia y con el conjunto de la OTAN ha sido considerado estratégico. Por ello, no sería un gran acierto para el Gobierno de Sánchez dejar vendidas tanto a la UE como a la OTAN en un momento en el que, no sólo la hiperdependencia de los rescates económicos comunitarios es patente, sino que, además, la magnitud global de esas ayudas se va a reducir por parte del BCE, por lo que una actitud desafiante podría provocar una rebaja adicional de esos esquemas de ayuda financiera a España.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció desde el Palacio de Versalles (Francia), lugar escogido para la cumbre improvisada de líderes de la UE con motivo de la invasión de Ucrania, que España aumentará su gasto militar.
Según el socialista, se elevará hasta el nivel del 2% del PIB. El mismo listón que la propia OTAN lleva cuatro años exigiéndole al Gobierno socialista, y que hasta ahora había sido ignorado. Donald Trump llegó a calificar a Sánchez de «moroso» por sus incumplimientos.
Y ahora, en el momento de mayor dependencia internacional de España de los esquemas de asistencia financiera y rescate europeos, Sánchez ha decidido que es hora de acabar con esa queja. Que necesita recuperar crédito internacional. «Tenemos que elevar la inversión en el capítulo de Defensa», afirmó el pasado viernes Sánchez desde Versalles, tras participar en el Consejo Europeo informal convocado por la Presidencia de turno de la Unión Europea.
Demanda de gasto militar
En esa cita, los principales líderes comunitarios llegaron a la conclusión de que la Unión Europea debe reforzar su papel en materia de seguridad común. Y si España es uno de los mayores beneficiados por la UE, España debe responder ahora a esa demanda de mayor gasto militar. De esa manera, Sánchez le da la vuelta a la situación, convirtiendo lo que hasta ahora era un reproche por parte de la OTAN en un compromiso personal.
España, de hecho, tan sólo tiene dos años por delante para duplicar su gasto militar si quiere cumplir con lo que le prometió a la Alianza. Eso supondrá disparar la inversión en defensa en los próximos Presupuestos Generales del Estado. Un planteamiento radicalmente contrario a los objetivos de Podemos, ERC o EH Bildu, los grandes socios de Sánchez.
Fue en 2014 cuando el Gobierno de Mariano Rajoy, en la cumbre de la OTAN celebrada en Gales, se comprometió a duplicar el gasto en defensa en el horizonte de una década. De esa manera, España pasaría a dedicar el 1% del PIB -cifra hasta la que retrocedió durante los años de la severa crisis económica- hasta el 2%. Un umbral que tanto la Alianza como el principal socio en cuanto a capacidades aportadas, Estados Unidos, exigía insistentemente.
Sin embargo, con la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa en 2018, aquella promesa cayó en saco roto. España se mantuvo durante esos cuatro años por debajo incluso del 1% -hasta alcanzar el 1,02% de 2021- pese a la multitud de ocasiones en las que se requirió a Sánchez aumentar el gasto. Gabriel Rufián y el resto de socios parlamentarios de Sánchez -Podemos y Bildu principalmente- han rechazado de plano ese aumento del gasto militar.
Pero el convencimiento en Moncloa sobre la necesidad de este aumento del gasto es pleno: “No se hará caso de las reclamaciones de todos ellos. Es un compromiso internacional firme”, señalan desde el PSOE.